La tecnología del ultrasonido consiste en ondas sonoras o vibraciones en frecuencias por arriba de los 20000 Hz lo que las hace no audibles para el oído humano. Estas ondas mantienen ritmo, forma y frecuencia constantes lo que genera que la energía mecánica de las vibraciones se transforme en energía térmica.
En el ámbito estético, estas ondas se utilizan como un método no invasivo e indoloro que penetra las capas de la piel para realizar diversos procedimientos y obtener grandes beneficios como combatir la celulitis, tonificar la piel (facial y corporal), evitar la retención de líquidos, mejorar la apariencia de várices, reducir medidas en contorno corporal, eliminar queloides, estimulación de colágeno, efecto analgésico.